Mi colección de
Maquillaje Vintage
Hoy me apetece mostraros por aquí parte de los cosméticos que estoy coleccionando, y que para mí, son muy especiales por la forma y el momento en los que han llegado a mi.
Creo que los productos de maquillaje me han gustado desde el momento en el que fui consciente del poder sanador que pueden llegar a tener, y por eso desde hace ya un tiempo, estoy sumergida en la búsqueda de productos de maquillaje que hicieron felices a mujeres del pasado. Me alegra poder decir que entre los productos que os voy a enseñar se encuentran los únicos polvos faciales que utilizó mi abuela. Ella nunca se compró, ni tuvo otro producto cosmético, solo los polvos que os mostraré en esta entrada, y que junto a las vivencias que tuve con ella, han sido la mejor herencia que me pudo dejar.
Os adelanto que mi colección es muy modesta y no aspira a más que a hacer volar mi imaginación, pensando en qué mujeres disfrutaron en su día de estas joyas.
Una de las cosas que más me gusta de este tipo de cosméticos es su envase. La mayoría vienen en unas cajitas preciosas de metal. Algunas incluso labradas, con pedrería añadida y elementos que hacen que esos cosméticos sean especiales desde el mismo momento en que los ves, actualmente, esto ya no es así. Ahora la mayoría de cosméticos, al menos de maquillaje, vienen en una cajita muy mona también, pero no dejan de ser envases de plástico y producidos a grandes escalas, lo que hace que en temas de coleccionismo no sean tan especiales.
Rosette Brune
Años 1930
Este colorete de Bourjois data del año 1879. En ese año Bourjois lanza su primer tono de colorete, que casualmente es el Cosette Brune, el mismo que veis en la foto. Como otros productos y envases de la época este colorete tiene un encanto muy especial, siendo su envase de cartón duro con un diseño muy emblemático, que a día de hoy, aun se sigue manteniendo en la marca con algunas variaciones. Este producto lo he encontrado en una tienda de artículos vintage de Oxford, Reino Unido, y desde allí me lo han enviado a Sevilla.
Me cuesta creer el tener en mis manos esta reliquia de cosmético.
Polvos Compactos
Años 1960 – 1970
Estos tres polvos de colorete compactos los tengo desde hace varios meses en casa. Fabricados y vendidos tan solo en España, en los años 60, aunque puede que salieran a la venta muchísimo antes. Están sin estrenar y en perfecto estado, solo se nota el paso de los años en detalles como la cajita, que al ser de cartón reciclado está algo sensible y en el packaging de metal que contiene el producto. Por algunas zonas se ve el óxido del tiempo, pero son detalles hermosos que hacen a estos productos aun más especiales.
love Pat
Revlon
Polvo Compacto
¡Aparezca ante el mundo radiante de belleza en un instante! Porque “Love Pat” es más que un polvo compacto, ¡es un maquillaje completo!
Ningún otro producto le ofrecerá una base con un matizado perfecto.
¡Y en polvo!, con lo que no tendrá que molestarse en usar bases adicionales.
Y el maquillaje “Love Pat” de Revlon no se endurece, no forma grietas, ni se amarillea.
Este texto era el que acompañaba al anuncio cuando salió a la venta en 1953. Revlon lanzó “Love Pat” polvos compactos en 8 tonos diferentes. Se estuvieron vendiendo con mucha aceptación durante muchos años. En 1960, Revlon lanzó estos polvos con diferentes polveras diseñadas por los joyeros Van Cleef y Arpers. Este diseño de packaging estaba dirigido a mujeres con una posición social elevada, aunque también se podían encontrar en envases más modestos. Estos joyeros no solo realizaron este diseño, había varios más. También lanzaron una colección de 6 labiales con piedras preciosas en el diseño del envase, que bien son dignos de museo hoy en día.
Este envase no llegó a comercializarse en España. Lo conseguí pujando en Ebay y me lo enviaron desde Estados Unidos. Sin duda es otra joya que me hace muy feliz tener entre mi colección.
Autumn Rose
Avon Cosmetics
Puede que estos productos os estén pareciendo auténticas joyas, así lo son también para mí, aunque sin duda alguna, la verdadera joya es este polvo compacto de Avon que os muestro en la foto.
Por más que he intentado buscar información sobre ellos, diseños parecidos y demás, no he encontrado nada, absolutamente nada. Así que os voy a contar la historia de estos polvos: mi historia.
Estos polvos que veis, son la herencia que recibí de mi abuela Matilde. Hace ya varios años que no está con nosotros, y a día de hoy, sigo echándola muchísimo de menos. El día que mi madre me dio esta cajita me sentí enormemente feliz y supe que mi abuela también lo iba a estar desde el lugar en el que se encontrase.
Me sorprendió mucho conocer que ella tenía estos polvos. Nunca la vi usarlos, y nunca noté en su rostro que llevara algún cosmético aplicado. Pero ahora con el tiempo, y cerrando los ojos para buscar recuerdos, puedo recordar el olor de su cara y la suavidad de sus mejillas, que casualmente son las mismas características de olor y tacto que tienen estos polvos, así que claramente, ella sí los usaba.
No era una mujer aparentemente presumida por fuera, pero si que lo era por dentro. Mujer de viejas costumbres y de familia muy humilde. No tuvo grandes riquezas, más allá que la de tener a su familia unida. Nunca malgastó el dinero y no solía darse ningún capricho. Por eso me sorprende que tuviera estos polvos.
Preguntando a mis tías y a mi madre, hemos averiguado que estos polvos ni siquiera se los llegó a comprar ella. Fue un regalo que le hizo una de sus hermanas el día de su santo.
Me gustaría poder seguir contando cosas sobre ella, pero entonces necesitaría otro post que hablase sobre sentimientos.
Pinaud
Máscara de pestañas compacta
París · 1960
Si nacisteis en los años 80-90, posiblemente os acordéis de un anuncio de maquillaje y esmaltes de uñas que solía salir siempre en la televisión y dónde se repetía constantemente: “Pinaud pianaud” . No soy capaz de recordar las imágenes, pero sí la melodía. Pues de esa marca francesa: “Pinaud”, es esta máscara de pestañas compacta.
Las máscaras de pestañas compactas nacieron, primero, para mejorar el estado de las barbas de los hombres. Mas tarde se modificaron las formulaciones y pasó a ser un producto para pestañas y cejas especialmente para mujeres.
Estas pastillas emulsionan al entrar en contacto con un poco de agua y puedes agarrar el color para aplicarlo en tus pestañas.
Fueron muchas casas cosméticas las que lanzaron este producto, entre los pioneros se encontraba Max Factor.
Helena Rubinstein
Red- Tone
1930 · 1940
Helena Rubinstein es sin duda una de las firmas más emblemáticas en el mundo de la cosmética actual. Al igual que la polvera de Revlon, esta de Helena Rubinstein, es una polvera con un diseño muy especial. Tenerla en la mano te hace sentir un tanto especial, ya que se aprecia un acabado de lujo.
El cierre del envase es perfecto y se conserva tan bien, que me hace tenerle aun más cariño. Es una polvera muy bonita y especial.
“Las obras de arte no se encuentran todos los días en la calle, no se sientan en la mesa frente a uno”
Max Factor´s
Moist Rouge Supreme
He dejado para el final el cosmético de más antigüedad que poseo. También es el cosmético vintage que lleva más tiempo conmigo. Es el primero que me compré y le tengo un cariño especial. Además, a raíz de tenerlo e investigar sobre los primeros labiales, ha nacido un proyecto muy chulo en el que estoy trabajando y del que pronto sabréis más.
Reconozco también que sobre este producto no hay nada de información por las redes y he tenido que tirar de preguntas constantes a otras coleccionistas para que me ayudasen. Con este labial me pasan varias cosas, me emociona muchísimo tenerlo y me emociona también que Lisa Eldridge haya sido la persona que me ha dado alguna información sobre él (aun no llego a creerme que respondiera mi mensaje privado en instagram).
Me comenta que debo sentirme feliz porque poseo uno de los primeros labiales que lanzó Max Factor. Ciertamente es así, en los años 20 comenzaron a venderse los primeros labiales en forma de barra, ya pensados para que las mujeres pudieran llevarlos en sus bolsos y utilizarlos de manera cómoda en cualquier tocador.
Este formato que veis en la foto, nace algunos años antes de la década de 1920. Max Factor lo crea especialmente para cubrir las necesidades que empiezan a surgir en Hollywood con los rodajes de las primeras películas de cine.
El producto en sí es muy denso y concentrado, aunque no lo he testado, me atrevo a decir que es un labial con un color rojo apagado precioso y de durabilidad infinita.
Si este post te ha parecido interesante, también tienes un vídeo en mi canal de youtube donde puedes ver con más detalle estos productos que muestro en el post.
Me encantará poder mostraros más productos, pero necesito saber si este tipo de contenido os gusta. Para ellos puedes utilizar los comentarios de este post, para saber si realmente os interesa.
Me gustaría añadir también, que si alguien dispone de alguna información extra, quiere añadir algo o corregir algún dato, puede aportar su granito de arena para que la información de este post y los productos sea aun más exacta.
Desde aquí les quiero dar las gracias al equipo del Museo de Maquillaje y Lisa Eldridge por su ayuda con parte de los datos.
Muy bonitos los productos pero el texto horrible,faltas de ortografía,gramática,ya son muchas entradas que he leído y tienen este fallo para mí inaceptable y espero que te lo tomes como crítica constructiva ya que veo que haces un buen trabajo con el blog pero el texto debería estar acorde a la estética y trabajo que expones.Un saludo.
Hola Lidia, muchísimas gracias por tu comentario, ya me lo están revisando y ayudando para que el texto esté mejor. Llego donde llego y aunque me esfuerzo en que esto no me ocurra, a veces puede pasar. No me lo tomo a mal, para nada. Todo lo que sea poder mejorar es mejor para todos. Un saludo.
Yo también tengo la polvera verde de Avon de mi abuela ??